El 14.6% de los mexicanos ha sido víctima de algún acto de corrupción por parte de algún servidor público, pero 82.6% decidió no denunciarlo, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
En el Día Internacional Contra la Corrupción, a celebrarse el próximo 9 de diciembre, indicó que los estados de Baja California, Tabasco, Jalisco, Chiapas y Nayarit tienen las mayores tasas de denuncias, con 97.8, 96.2, 93.7, 92.2 y 91.8%, respectivamente.
Quintana Roo, Colima, Michoacán, Ciudad de México y Guerrero figuran como las entidades con menores tasas de denuncias, con 61.3, 69.6, 73.2, 76.5 y 76.6%, respectivamente.
Señaló que la falta de confianza en las autoridades es el principal motivo de la población para no acudir anunciar ese incidente.
Incluso, apuntó, casi tres de cada 10 víctimas de corrupción no denunciaron porque obtuvieron algún beneficio o bien y es porque consideraron que la corrupción es una práctica común.
Esto a pesar de que 56.7% de la población, de 18 años y más, consideró que la corrupción es uno de los problemas más importantes que enfrenta la entidad federativa donde reside, solo por detrás de la inseguridad y la delincuencia.
En 2017, los resultados evidenciaron que el porcentaje se incrementó 91.1% de quienes piensan que la corrupción es un acto frecuente en su entidad federativa.
En ese año se reportó que 14.6% de la población sufrió algún acto de corrupción al tener contacto con algún servidor público y la Ciudad de México es la de mayor porcentaje de víctimas, con 20.1%, seguida de Quintana Roo, con 17.6%, y Morelos, con 17.2%, de acuerdo con los datos dados a conocer este jueves.
Contrario a ello, Guanajuato, Puebla, Veracruz, Colima y Nayarit, con 9.0, 9.6, 10.6, 10.6 y 11%, fueron las entidades con las menores prevalencias de corrupción.
A nivel nacional se observó un aumento de poco más de dos puntos porcentuales en el porcentaje de población víctima de corrupción, al compararlo con lo estimado en 2015 y 2013, añadió el INEGI.