La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) insistió en que el gobierno federal debe dar continuidad al programa de Zonas Económicas Especiales (ZEE), con el objetivo de impulsar la inversión.
Consideró que es prioritario preservar o evolucionar las ZEE, “pero no eliminarse sin un fundamento claro para ello”, el cual parecía ser promisorio como instrumento de política pública para detonar las inversiones desde las regiones de bajo nivel de desarrollo.
El organismo patronal apuntó que una debilidad clara de la oferta exportadora de México es su bajo nivel de integración nacional, y en algunos sectores el valor agregado mexicano se reduce a la mano de obra.
Por lo que es necesario desarrollar opciones de desarrollo de calidad y fortalecimiento financiero, específicamente diseñados para que las pequeñas y medianas empresas puedan convertirse en proveedores de las empresas altamente exportadoras.
Explicó que un ejemplo de esfuerzo de integración es la Alianza Centro Bajío Occidente (ACBO), conformada por Aguascalientes, Guanajuato, Jalisco, Querétaro y San Luis Potosí, que se propone alcanzar el liderazgo como la región más competitiva de Latinoamérica.
De tal forma, la Coparmex señala que es evidente la aplicación de esa política pública y no debe postergarse, para seguir el trabajo de diversificación de mercados y productos, e incrementar el componente nacional de las exportaciones.
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Ello, porque “la fortaleza del intercambio con Norteamérica no debe ser razón para ignorar otras oportunidades (de mercado)”, apuntó el organismo dirigido por Gustavo de Hoyos Walther.
Acentuó que las recientes amenazas de Estados Unidos de imponer de forma súbita medidas arancelarias a México, aunado a la vulnerabilidad que se hizo manifiesta para nuestro país, reafirman esa necesidad.
Mientras que las exportaciones al otro lado de la frontera norte se acercan al 80% del total de México, las de Canadá y Alemania representan solo 3 y 2%.
“Es evidente que nuestro país puede hacer más para impulsar más productos a más mercados, pero para detonar ese proceso se requiere implementar algunas medidas de política pública”, reiteró mediante el documento Señal Coparmex.
Explicó que es también urgente otorgar certidumbre a la inversión exportadora, a través de la estabilidad de las leyes, instituciones y programas relacionados.
La apertura de sectores, como el energético; la estabilidad del sistema fiscal, especialmente sobre los impuestos al Valor Agregado (IVA) y Sobre la Renta (ISR) y la gradualidad en los ajustes laborales y salariales son determinantes para el crecimiento del sector exportador.
