¿Aún no es tiempo de la reforma en subcontratación?
El CCE alertó sobre las “gravísimas consecuencias en la economía del país” que traería la aprobación de una reforma en materia de subcontratación
Laboral
El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) alertó sobre las “gravísimas consecuencias en la economía del país” que traería la aprobación de una reforma en materia de subcontratación, como lo pretende hacer el senador Napoleón Gómez Urrutia hoy, pues “es totalmente inadecuada y desproporcionada, ya que genera un alto grado de incertidumbre, poniendo en riesgo la inversión nacional y extranjera, busca criminalizar las relaciones laborales y es a todas luces inconstitucional”.
El pasado 29 de octubre, el senador Gómez Urrutia, del grupo parlamentario de Morena, presentó ante el pleno la iniciativa con proyecto de decreto que reforma y adiciona la Ley Federal del Trabajo y la Ley del Seguro Social, cuyos ejes centrales son “medidas para erradicar el outsourcing e insourcing ilegales”, y niega que ésta ponga en peligro el T-MEC.
No obstante, el CCE argumentó que la iniciativa que se pretende aprobar no ha tenido ningún tipo de consulta con los sectores productivos. Declaró que “no se ha llevado a cabo una reflexión y evaluación del impacto que tiene para la actividad económica, y no se han escuchado las preocupaciones de las partes”.
El CCE, que encabeza Carlos Salazar, hizo un exhorto al “diálogo profundo, con un esquema de Parlamento abierto, o las modalidades que el Congreso decida, para permitir tener una evaluación real de las consecuencias que acarrearía esta reforma”.
En su momento, la secretaria de Trabajo y Previsión Social, Luisa Alcalde Luján, expuso que se tiene que discutir el tema de la subcontratación, pero con una visión más amplia, sobre todo enfocada a la Ley del Seguro Social, pues en todo caso la Ley Federal del Trabajo ya tiene un avance en la regulación desde el 2012.
Consultado al respecto, el secretario técnico de la Comisión de Trabajo, Marcos del Refugio Rodríguez, comentó que es indispensable que se lea bien el dictamen, pues se sigue haciendo una lectura errónea del contenido del mismo.
*Con información de El Economista