En México, al menos el 75% de la Población Económicamente Activa (PEA) padece estrés laboral, señaló la plataforma de salud mental, MiMente, que agregó, esto tiene un impacto directo en la baja productividad de los trabajadores, ya que el bienestar general de los empleados se ve afectado, y el ejemplo más claro es lo ocurrido en los Juegos Olímpico de Paris 2024.
La clausura del magno evento dejó un sinfín de hazañas y momentos históricos para las diferentes naciones participantes, pero sin duda, una de las lecciones con mayor impacto fue lo ocurrido con la gimnasta estadounidense Simone Biles, quien no solo se convirtió en un ejemplo de resiliencia, sino en un modelo a seguir en cuanto a los beneficios que tiene priorizar la salud sobre el trabajo.
En Tokio 2020, la gimnasta anunció su retiro temporal de la competencia debido a una crisis de ansiedad y depresión, un suceso que sin duda abrió diversos debates, no obstante, firme en priorizar su bienestar, Biles se tomó un tiempo para poder equilibrarse y 4 años después se consagró como una de las mejores gimnastas del mundo, mostrando que una mente saludable es la clave del éxito.
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Impacto de atender la salud mental en el trabajo
De acuerdo con información de la Organización Mundial de la Salud (OMS), citada por MiMente, el agotamiento emocional en el trabajo “se ha convertido en una epidemia mundial”, y en el caso de México, es el país con el mayor nivel de estrés en el mundo, ya que aún existen compañías que no consideran dentro de sus estrategias la atención a la salud mental de los colaboradores.
Aunque la plataforma aseguró que según datos de la OMS, por cada dólar invertido en tratar la depresión y ansiedad, hay un retorno de 4 dólares, aún hay empresas que no ven los beneficios de esta inversión, ignorando así los costos ocultos que tiene el estrés en el trabajo, ya que conlleva a personal menos productivo, mayor rotación, ausencias, enfermedades y accidentes laborales.
En ese sentido, el fundador y director de MiMente, Alberto Fernández, mencionó que “impulsar la importancia de la salud mental de los equipos de trabajo en todos los niveles del organigrama” es fundamental para la productividad de un negocio, y aunque la ansiedad, depresión y estrés son estados naturales del ser humano, “deben atenderse con seriedad por parte de los empleadores”.
Por lo anterior, recomendó a las organizaciones invertir en la salud mental de los empleados a través de prácticas de atención y prevención con actividades como la meditación, terapia u otras herramientas de gestión emocional que permitan disminuir la rotación de personal y optimicen la de productividad laboral.
