Las perspectivas económicas para 2018 y 2019 dependerán de la incertidumbre asociada a la actual renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), y el proceso electoral de julio; sin embargo, las autoridades tienen el compromiso de preservar un marco macroeconómico sólido, con finanzas públicas sostenibles y medidas que propicien la inversión y el crecimiento de la productividad, afirmó el Banco de México (Banxico).
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Por otra parte, anunció que estará “atento” y monitoreando el desempeño del mercado cambiario ante la imposición de aranceles a las importaciones de acero y aluminio de México, Canadá y la Unión Europea (UE) a Estados Unidos partir del primer minuto del 1 de junio.
“Muy atentos y también monitoreando y listos para, en caso de que sea necesario, tomar las acciones correspondientes, pero no hay que adelantar y hay que ver cómo evoluciona esto”, dijo el gobernador del Banxico, Alejandro Díaz de León, en entrevista radiofónica con Grupo Fórmula.
Sobre una probable participación de la Comisión de Cambios por un eventual efecto en el peso mexicano, recordó que esta actúa cuando las condiciones de liquidez se reducen de manera significativa y el mercado cambiario se vuelve con poca profundidad, “no tanto cuando hay una noticia que deba ser incorporada en la dinámica de precios”.
Por último, el banquero central mexicano consideró que las acciones potencialmente proteccionistas son un elemento de riesgo tanto para el crecimiento como para la inflación, por lo cual “veremos cuál es un poco el resultado de esto”.