El Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI), que tendría como finalidad atender a toda la población sin seguridad social, tendría unimpacto presupuestario de equivalente el 3.2% del PIB, adicional al presupuesto actual de Seguro Popular y el Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (FASSA), de acuerdo con un análisis del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
El estudio del CIEP consideró diez escenarios distintos del impacto presupuestario del INSABI. De estos, el menor reflejó un presupuesto adicional de 0.6% del PIB de 2019 y el más alto, 3.2%. Además, se estimó de manera adicional el costo laboral de absorber al personal del sector salud de los estados, el cual podría ascender a 17,991 millones de pesos.
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Por otro lado, el análisis destacó que para la consolidación de un sistema universal de salud en México se necesita definir una ruta crítica de actores y procesos, así como un calendario que guíe la transición del sistema actual al que se propone, y la integración de muchos y variados subsistemas.
Se prevé que el INSABI ofrezca un paquete ilimitado de servicios, sin pago por concepto de cuotas y contemple un cambio en el esquema laboral de absorber al personal en plazas estatales del sector salud.
Sin embargo, de acuerdo con las estimaciones del CIEP, es necesario tomar en cuenta los costos actuales de salud, así como el cambio demográfico y la transición epidemiológica, donde las enfermedades crónico degenerativas han empezado a sustituir de manera creciente a las enfermedades infecciosas.
Además, se debe de garantizar un financiamiento suficiente, incluyendo fuentes y corresponsabilidades, para que la sostenibilidad de largo plazo del nuevo sistema esté garantizada.
