La junta de gobierno del banco central de México consideró “indispensable” ajustar la política monetaria para que la inflación converja a la meta de 3% en el horizonte de pronóstico.
La minuta señaló que la junta tomará las acciones que considere necesarias, en particular el mantenimiento o un posible refuerzo de la postura monetaria actual, a fin de que la inflación general converja al objetivo fijado por Banco de México.
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“La junta mantendrá una postura monetaria prudente y dará un seguimiento especial, en el entorno de incertidumbre prevaleciente, al traspaso potencial de las variaciones del tipo de cambio a los precios, a la posición monetaria relativa entre México y Estados Unidos y a (...) la economía”, indicó.
El pasado 15 de noviembre el organismo elevó la tasa de interés de referencia a 8% citando presiones inflacionarias, y advirtió sobre los riesgos de algunas políticas del gobierno entrante para el crecimiento económico y la formación de precios.
Al respecto, la subgobernadora Irene Espinosa justificó “los ajustes que han experimentado los mercados financieros locales han sido de magnitudes superiores a las ocurridas en otras economías emergentes”.
La inflación general se desaceleró más que lo esperado al subir un 4.56% interanual hasta la primera mitad de noviembre, pero sigue lejos de la meta permanente de 3%, además de que, de acuerdo con el Banco Central, enfrenta riesgos importantes relacionados con la posible adopción de políticas que afecten el proceso de formación de precios en la economía.
