Reforma IESPS: proponen cuotas diferenciadas a alcohol

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Diputada planteó reforma al IESPS con cuotas ad quantum para bebidas alcohólicas, protegiendo producción artesanal y combatiendo evasión fiscal
La diputada Vanessa López Carrillo (PT) propuso reformar la Ley del IESPS para establecer cuotas diferenciadas para las bebidas alcohólicas. La iniciativa busca aplicar una cuota de 2 pesos por grado por litro a las bebidas con alcohol y cerveza, y de 1.6 pesos por grado por litro a las bebidas tradicionales con denominación de origen.
De acuerdo con un comunicado, el objetivo principal de esta reforma es aumentar la recaudación local, simplificar la estructura fiscal, combatir la evasión fiscal y proteger la producción artesanal sin desincentivar el consumo. La propuesta fue turnada a la Comisión de Hacienda y Crédito Público para su estudio y dictamen.
La legisladora argumentó que al reducir la carga impositiva sobre productos con denominación de origen, como el mezcal, se fomenta la preservación de técnicas de producción ancestrales y se fortalece la identidad regional.
Asimismo, según el comunicado, se consideró fundamental modernizar la forma en que se recaudan los impuestos a las bebidas alcohólicas. La imposición basada en el contenido alcohólico, en lugar del valor de mercado actual, desincentivaría el consumo de bebidas de alto contenido y baja calidad, que son accesibles para los jóvenes debido a su bajo costo, lo que puede provocar problemas de salud, accidentes vehiculares y violencia.
La legisladora señaló que el esquema actual, basado en el valor de mercado, genera inequidad fiscal entre bebidas con características similares y perjudica a las bebidas tradicionales y de mayor valor agregado, como el mezcal y el tequila, en comparación con bebidas industrializadas y de menor calidad, como los aguardientes, debido a una carga fiscal desproporcionada a pesar de tener graduaciones alcohólicas similares.
Previamente, Gerardo Esquivel, del Colegio de México, propuso realizar un cambio de esquema tributario de ad valorem a ad quantum, propuesta que respaldaron los legisladores presentes en el conversatorio donde se llevó a cabo la misma.
En la propuesta de la legisladora del PT, la aplicación de un esquema ad quantum, donde el impuesto se basa en la cantidad de alcohol, brindaría certidumbre y equidad tributaria a los productores, fortalecería las economías rurales al generar empleos directos e indirectos, promovería la preservación de prácticas tradicionales y fomentaría la innovación en el sector al incentivar la producción de bebidas con menor graduación alcohólica.
Además, continuó el comunicado, este esquema simplifica la fiscalización, ya que el contenido alcohólico es constante desde la producción hasta la venta final, lo que limita las oportunidades de evasión fiscal, reduce la competencia desleal del mercado negro y permite una mayor recaudación sin elevar desproporcionadamente los precios.
Se destacó que el esquema ad quantum fue implementado con éxito en países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), lo que demuestra su eficacia para alinear los incentivos fiscales con los objetivos sociales y económicos.
Asimismo, concluyó el boletín, la reforma propuesta establecerá un marco tributario más justo y eficiente que impulsará el crecimiento económico y protegerá la salud pública.
El documento señaló que los ingresos por concepto del Impuesto al Valor Agregado (IVA) experimentaron un aumento real anual del 8.3%, superando el crecimiento promedio del 3.0% real registrado entre 2015 y 2024.
Este incremento se atribuyó principalmente al aumento del IVA en las importaciones, impulsado por la depreciación del tipo de cambio en los primeros cinco meses del año.
Asimismo, los ingresos derivados del Impuesto General de Importación (IGI) alcanzaron su mayor crecimiento histórico.
Esto fue resultado de diversos factores, incluyendo la modificación de aranceles para 544 fracciones arancelarias aplicables a países sin tratado comercial con México, una mayor vigilancia aduanera y los efectos de la variación cambiaria, que elevaron el valor en moneda nacional de las importaciones y, consecuentemente, el monto de la base gravable.
En contraste, los ingresos por concepto del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IESPS) mostraron un menor dinamismo. Esta reducción se debió a una menor recaudación vinculada al consumo de tabaco, bebidas alcohólicas, cervezas, refrescos y bebidas energizantes.